jueves, 17 de marzo de 2016

Suelos laminados



El entarimado y su colocación

 Al momento de colocar una tarima, es importante conocer el debido proceso por el cual debe pasar dicho entarimado, primeramente se deben sujetar los rastreles a través de las puntas de París. Cuando son trabajos donde la velocidad y el tiempo juegan un factor importante, los entarimados deben ser provisionales y de fácil retiro al momento de quitar, las puntas pueden estar clavadas directamente a la superficie.
Muchas problemáticas son las que se presentan al momento de realizar este tipo de labores pues, mayormente la cabeza de los clavos quedan a simple vista, afectando la visualización estética de la pavimentación además de su duración, esto se debe a que como es lógico el metal es más resistente que la madera en cuanto al desgaste, lo que conlleva a que la madera sufra, y la unión se mantenga igual.
Un entarimado realizado de esta forma, tan veloz y provisional sufrirá siempre la madera, y al cabo de un tiempo de uso se verá que la madera ha disminuido su nivel y quedará rebajada en comparación con el clavado que mantendrá el mismo lugar que se le concedió desde un principio al momento de armarlo. Además de que las cabezas que sobresalen pueden también salirse de su sitio dañando la estructura.

La forma correcta de colocar el entarimado

Para poder clavar la madera en conjunto con la unión y evitar entonces todo el daño antes mencionado, es menester conocer que, para que se puede realizar de forma óptima y todo finalice en buenas condiciones, el clavo debe ser colocado con una inclinación aproximada de 45° con respecto a la superficie, y debe estar ubicado en la ranura de la hembra para que el suelo de madera tape la cabeza del clavo sin problemas.
Aislamiento del entarimado
En caso de lluvias o acciones rápidas donde la tarima exterior deba ser protegida o recubierta con algún aislador, el proceso más óptimo, rápido, eficaz y eficiente para realizar dicha acción es y consiste en intercalar entre rastrel y rastrel cualquier material conocido que posea características que contrarresten la humedad, ya sea un fieltro aislante o una capa de espuma de polietileno.
Para mejorar y aumentar la eficacia y eficiencia en cuanto al aislante debe considerarse la ubicación donde las lamas van clavadas, que lo recomendado es en el aislamiento sobre el solado, debe estarlo cubriendo en su totalidad, y sobrepuestos a ellos deben ir los rastreles sin inconveniente alguno, a pesar de ser un sistema flotante porque los rastreles no se anclan en la solera.
En cuanto al aislamiento tradicional que aún se mantiene vigente en algunos espacios bajo los suelos laminados, es menester recalcar que tiene como ventaja ante el sistema antes mencionado, que el tradicional fija el entarimado de forma tal que queda como si fuese un trabajo de suelo laminado, pues la madera que va fijada al asfalto queda adherida al mismo muy fuertemente.

tambien de aquí

No hay comentarios:

Publicar un comentario